miércoles, 21 de marzo de 2012

¿GUANTES MALOS?... !TENGO LAS MANOS CONGELADAS!



Homenaje a mi Yamaha 500 bicilíndrica 8 valvulas y a un día frío de 1977

YO SE POR QUÉ TIENES FRÍO EN LAS MANOS
No me acuerdo de cuántos Barbours o chaquetas de moto he tenido pero si tuviera que recordar con cuál de ellos me he sentido mejor en invierno diría que fue con una que compré en Andorra de la marca Motomod hace al menos 30 años. Estaba realizada en polyamida  dura, su forro era muy acolchado y su material era de laminado metálico. Si pegaba el frio de verdad me colocaba debajo un auténtico jersey marinero Dalmar que me regalaron en la Bretaña francesa …en 1975 y listo. Ya podía soplar la tramontana a 200 por hora.
Todavía los conservo y están como nuevos los dos, la chaqueta y el jersey, el problema era y es que si durante un viaje se relajaba el tiempo y dejaba de hacer frío, como la chaqueta no transpiraba, sudabas como un tocino. Entonces no se comercializaba el Gorotex ni las fibras parecidas y tuvieron que pasar algunos años para disponer de esos materiales transpirables pero cada vez que me dispongo a ponerme una moderna Clover  –excelente chaqueta motera con múltiples aberturas que auto regulan el aire a discreción- o la Dainese última generación, por supuesto con fibras Gorotex , si hace frío, frío, no dejo de mirarme de reojo la Motomod que permanece colgada en un lugar preferente del armario. Y encima no pesa nada y tengo que confesar que eso me puede.
Pero si miro hacia atrás intentando recuperar a mi memoria unos guantes mágicos que me hayan preservado de las duras inclemencias meteorológicas en mis salidas y viajes…pues no me aparecen por ningún lado y en cambio sí suelo acordarme de que he pasado más frío que Carracuca. Incluso cuando decidí hace años adquirir unos Dainese con el Gore famoso que eran el no va a más, me decepcionaron rapidísimamente hasta tal punto que los envié a la fábrica de Italia para ver si tenían algún problema .Como estaban en garantía…
Pero no. Eran así y así tenían que ser, me dijeron .Y después de probar otros de otra marca y de ver como  mi amigo Manel se le quedan los dedos chungos de frío con unos guantes BMW – no le ocurre solo a él- he llegado a la conclusión de que quizá los fabricantes lleven razón y que el problema pueda ser que nosotros les exijamos demasiado a unos productos que tienen su límite de actuación. O sea, por ejemplo, que su ámbito óptimo de protección se encuentre a temperaturas medias de no menos de10 grados. A 5, a 4 o a 0 grados, búscate la vida. ¿Esto es  así o influyen decididamente otras cosas en las prestaciones de unos guantes – a veces de muy alto precio- incluso de marca reconocida?

Chaqueta North Face de Primaloft


Vamos a situarnos, por un poner…, que estamos en una tienda especializada del centro de Madrid y otra de Barcelona. Manolo sale del comercio madrileño con unos magníficos guantes de moto que se acaba de comprar, se los enfunda y se dirige a su casa en Alcobendas. En la calle, el termómetro marca 7º. Pep se compra otros iguales de la misma marca y modelo y se va en su moto a Premiá de Mar, población limítrofe a Barcelona, a, más o menos, la misma distancia. El termómetro indica también 7º.
Conclusión nº 1: A Pep le llegará mas sensación de frío en las manos que a Manolo porque la zona de costa en general es más húmeda que la del centro de España y esa sensación desagradable se irá apoderando de sus manos diabólica y proporcionalmente cuanto más kilómetros realice. Incluso Manolo probablemente mantendría las manos en buenas condiciones con 2 o 3º menos, ambientales.

 LA CHAQUETA MILAGROSA
Antes que nada voy a introducir un detalle que quiero resaltar y que para mí ha sido todo un descubrimiento y además tiene que ver con esta historia de guantes.
Cuando viajamos en moto, aparte de la chaqueta o barbour puesto, solemos llevar muchos en la maleta una segunda cazadora más de calle que utilizamos al final de viaje para pasear y a veces también empleándola como un plus de  abrigo debajo de la técnica con protecciones. Esa chaqueta excelente que abrigue y que no abulte plegada y que no pese, la encontré al fin, durante una excursión a Girona en una tienda especializada de montaña de buen rollo -el dueño ex motero y su hijo campeón de España no sé cuántas veces de montaña-.
Es un anorak  que recuerda a las del tipo pluma. Es bastante ajustada, se comprime en su mismo bolsillo -buena para viajar- y goza de un auténtico peso de campeón: 550 gr. Pero lo extraordinario es que descubrí que esa The North Face es en realidad un forro como lo indican sus gomas en las muñequeras y tiene en su composición una fibra llamada Primaloft que increíblemente mantiene el cuerpo súper confortable hasta llevando –una camisa- poca ropa debajo. Se diseñó para los alpinistas de alta montaña  –ya sabéis, los que se cuelgan de los glaciares-  y también la incorporó en su equipo Albert Bosch, el deportista que en solitario ha realizado la travesía por el Polo Sur caminando 1.152 kilómetros. No sé si quedan ya esta temporada pero os atenderán fantásticamente en : esportsnabes.blogspot.com  tel- 972202146  Girona.

 North Face Primaloft

Unik H 11

GUANTES DE MOTO CONTRA GUANTES DE NIEVE-ALTA MONTAÑA
Tiene que ver esto de la chaqueta por que la semana pasada adquirí unos guantes de moto marca Unik por 65 euros, realizados en piel de vacuno y con un sistema ya visto que consiste prácticamente en alojar un guante o membrana de goma en el interior de su piel. El acabado es correcto, el guante es algo mazacote pero agradable al tacto de la mano y la sensación general  es que es bastante gomoso. Me recuerda a los pollos esos de juguete de material sintético que se escurren cuando los coges. Y no va en descrédito: a mí esos pollos me gustan.
El chico que me atendía en la tienda me confesó que un compañero suyo iba probando todos los guantes en esta época de frío aprovechando el viaje a su casa, fuera de Barcelona. Y esos le gustaron. Este texto está escrito hace más o menos un mes, que fue justo cuando tuvimos en toda España y en Europa temperaturas de lo más gélidas. Precisamente por eso mi prueba particular en esas condiciones me pareció muy oportuna.
El día que los compre era  húmedo y bastante frio -de hecho ya era de noche- y me dispuse a probarlos  sin más dilación durante un recorrido  de una treintena de kilómetros que hay hasta mi casa con temperaturas que oscilaban entre los 2º y los 7 º. Arranqué en pleno centro de Barcelona -mis manos desde luego no estaban calientes-, y no pasaron ni dos minutos para  que se quedaran ya de entrada congeladas. El helor crecía y crecía a gran velocidad por todas mis extremidades táctiles. Llegué a casa en paupérrimas condiciones y sin ningún tacto sobre las manetas del freno y embrague. Tras la gran desilusión pensé: ¿Eran tan malos aquellos guantes? Desde luego, en aquel momento no tenía dudas.

El frío es siempre mal amigo de la moto.

TECNOLOGÍA PRIMALOFT
Con la experiencia ya conocida de los Dainese de Gorotex en el que el problema había sido el mismo, intenté probar con otra tecnología. Lo cierto es que al día siguiente se me ocurrió la idea, visto lo visto con el éxito de la chaqueta montañera, de preguntar a la tienda de Girona si existían  guantes de alta montaña que llevaran la misma fibra “mágica” de Primaloft…y me encontraron unos, los últimos, de oferta a 85 euros. (130 precio original). Me tiré a la piscina arriesgándome en busca de la salvación de mis manos. Eran unos The North Face Impact Globe, mezcla de Gorotex, piel y Primaloft y con espuma contra impactos  –un material semi blando que se endurece en milésimas de segundo- en los dedos y parte superior de la palma con garantía de por vida. (Hace pocos días descubrí unos Dainese con esa fibra)
Tenía ahora la posibilidad de comparar unos guantes concebidos para moto contra otros diseñados para la dureza de la alta montaña. Y eso hice. Primero, probando los Impact Glove como probé en el recorrido con los Unik. También salí con las manos frías pero aunque en el primer momento el tacto interior de los dedos resultaba más acolchado y acogedor, lo cierto es que lentamente las manos …se me fueron anestesiando hasta un llegar a un punto de falta de tacto desagradable al cabo de unos 6 o 7 kilómetros.

Una solución calefactable un poco liada.

SI SALES CON LAS MANOS FRÍAS, EL “CONGELE” ESTÁ ASEGURADO
Ese fue el primer fallo y lección, ya que partiendo con las manos frías, la recuperación simplemente no existe. La segunda prueba la realicé a la ida con un guante diferente en cada mano y esta vez con las extremidades previamente atemperadas. El Unik se mostraba cómodo en un principio con los dedos bastante sueltos pero poco a poco la funda-guante de latex interior que en principio tendría que hacer de aislante se nota demasiado fría  y no logró detener la humedad exterior. También la piel que cubre el dedo grueso resultaba insuficiente generándose allí una zona donde la baja temperatura exterior iba haciendo mella. (La prueba la hice el domingo 5 de Febrero, en plena bajada de temperaturas continentales en un recorrido por la costa, sobre 2º.)
La mano embutida en el The North Face, ahora sí, conseguía mantenerse en un punto neutro –el Gorotex no genera calor pero evita que entre un frío relativo - y me imagino que el Primaloft hacía su trabajo, que me recordó al que produce en la cama un edredón sobre tu cuerpo en el punto justo en el que no pasas calor pero estás a gusto.
Hice un recorrido con los North Face y otro al final con los Unik. Hubo un momento que paré para hacer una foto y durante el minuto que tuve la mano fuera del guante montañero fue suficiente para que bajara el nivel calorífico de los dedos y ya no volviera a tener ese grado amable de temperatura. Aún así, opté por cambiar de guantes introduciendo uno soto guante de seda dentro de los Unik y acto seguido mejoró el confort de los mismos muy positivamente.
Una cosa está clara: Esa es la aplicación que les daré directamente  ya que al ser de talla holgada no se deforman con los soto guantes. Los Unik  son como mi vieja chaqueta Motomod, que bien embutida calentaba pero con menos frío no transpiraba, y mejor que no lloviera. No es el caso, pero cuando eso ocurre algunos huelen a podrido.
Los Impact Glove son originales y de una tecnología muy currada que aunque no son de moto -su caña es estrecha- hacen un buen papel ante  temperaturas “razonables” y, eso sí, muy preparados para los diluvios.

Guantes de montaña del Ejército

OTROS FACTORES
Ya hemos dicho que hay factores que hacen variar las características de un producto. Seguramente en los guantes también ocurre eso. Por ejemplo,  las personas también somos diferentes, una de otra. Al margen que Manolo siente menos el frío en Madrid porque la capital tiene un clima seco y Pep, a la misma temperatura, lo sufre más en Barcelona porque su clima es húmedo, puede haber otras diferencias constitucionales entre ambos. No todos tenemos el mismo riego sanguíneo y tu también estás en el saco. O sea que lee y ya verás.

 A LO MEJOR TIENES EL SÍNDROME DE RAYNAUD…
El padre del vendedor de la tienda de ropa de montaña que es un experto excursionista y esquiador me confesó que una semana antes de comprarle los guantes había estado esquiando y de repente se vio sorprendido por un ataque de frío intenso en sus manos. El helor fue tan insoportable que tuvo que salir de las pistas y meterse  urgentemente en un refugio  acondicionado. Se acabó el esquí para él ese día.
Mi cuñado Tino, que es traumatólogo, y mi amigo Juanma,  que es médico -ambos van en moto-, me explicaron algo interesante sobre otras causas y efectos que acaban fastidiando una salida invernal en moto. Mi interpretación es esta:

El sistema vegetativo del cuerpo humano actúa como un termostato y regula el calibre de las arterias dependiendo de la temperatura que recibe el cuerpo. Ese es el circuito periférico. Así, hay personas más sensibles que otras en los que sus vasos sanguíneos se contraen diferentemente ante situaciones extremas  de frío o calor. Lo primero que preserva el cuerpo de un humano ante una agresión climatológica extrema es la cabeza –un importantísimo elemento en contacto directo en el exterior- protegiéndola de los elementos  peligrosos como las bajas o también altas temperaturas que podrían provocar por una falta de protección natural en ese aspecto incluso un síncope o la muerte. Mientras, el flujo sanguíneo intenta circular por todo el cuerpo nutriendo como lo harían las canalizaciones de un radiador, refrigerando como una bomba de calor, las partes vitales como el corazón y pulmones, etc .
Pero, ¡ah amigos!, el circuito no es perfecto y en muchas personas eso se nota más dejando sin atender las partes más alejadas del cuerpo: las extremidades de manos y pies. En determinadas circunstancias de frío, por ejemplo, se cierran las arterias de esas partes (las manos) para economizar, mientras se ocupa del resto del cuerpo. O sea que ahí no llega el bombeo. Igualito que lo que pasa en el cuarto piso de una casa donde apenas llega la presión del agua o se cierran  los radiadores de esa planta para calentar mejor los pisos inferiores. Y ya le puedes poner una manta encima de un radiador apagado o unos guantes a una mano que ya está tiesa, que no sirve para nada.
Lo que le pasó al vendedor -probablemente sea una persona especialmente sensible a las bajas temperaturas, yo también lo soy– fue que sus vasos sanguíneos de las extremidades se contrajeron  súbitamente debido al frío reinante cerrando el flujo necesario de sangre que las regaba, y sus manos se quedaron más tiesas que un palo mientras su maquinaria de bombeo de urgencias se ponía en marcha para proteger el resto del cuerpo. La hipersensibilidad en este aspecto y en grado superior se llama Síndrome  de Raynaud.
Pero incluso existen más ramificaciones: lo que le pasó al vendedor -palidez, dolor- lo catalogaríamos como “fenómeno”. Luego tenemos el “Síndrome” que son aquellos casos que el fenómeno se presenta secundario a otra patología-hiperreactividad del sistema nervioso simpático, incluso leucemia, artritis, o también traumas vibratorios. Esto lo sufren especialmente los músicos -pianistas y guitarristas- y…los motoristas. Y por último, está la “enfermedad” de Raynaud, casos que el fenómeno se presenta por las bravas sin aparente causa etiológica y cuyos desencadenantes serían…los cambios de temperatura.

Al final lo mejor es esto

Así que ya tenemos algo más. Probé al final incluso unos enormes guantes del Ejército con forro polar independiente incorporado –no me preguntéis de donde los saqué- que al cabo de una par de kilómetros en moto fallaban por las costuras frontales de los dedos y los enfriaban rápidamente. Quizá para hacer guardias sirvan…
A lo mejor, esos guantes, los Unik y los Face Impac Glove, calientan más dependiendo … de quien se los ponga, sobre todo si el que los lleva no sufre ni el fenómeno, ni el síndrome, ni la enfermedad de Raynaud. En mi caso, lo que puedo decir es que su rango de temperatura ideal estaría entre los fríos 8-10 grados y los templados 20º, aunque a esta temperatura mis manos, en los Unik, comienzan a sudar.

LA DIFERENCIA ENTRE UNOS GUANTES DE 60    Y OTROS DE 130 €… ES QUE EL FRÍO TARDA ALGO MÁS EN LLEGAR
Esa frase me la regaló un vendedor de una tienda especializada de ropa moto y seguramente tiene razón. Hay otras vías, como los puños calefactables, buena idea aunque me comentan que acaba enfriándose una parte de la mano o los guantes eléctricos enchufados en la batería de la moto...con largos cables enmarañados. Estos merecen por sí solos otra comparativa o estudio. Aunque  el mismo vendedor me soltó que tenía algún cliente que le había comprado unos y que después de probarlos le dijo que “en la tienda calientan, pero en la carretera no matan”.
Hay también sobrecitos químicos que intercalados en los calcetines de los pies funcionan potablemente. También lo he probado y luego existen remedios caseros para poner a tono las manos frías, tipo remedios de la abuela como tomar infusiones de la planta ginko biloba que tiene cualidades dilatadoras. Los baños alternativos de agua caliente y fría desde luego no van mal para reactivar tus extremidades heladas. ¡Ah! otra cosa que funciona es aplaudirte mucho cuando estás aterrado de frío en medio de una estepa helada …pero es recomendable que pares la moto antes. Y la última, toda una clásica, es meter tus manos debajo de tu culito sentado en una silla.
 Pero al final, al final de todo, hay que decir que la solución, pero solución buena de las buenas, es simplemente instalar unas manoplas como las que llevan los carteros. Viejo método, comprobado e infalible. Mi amigo Xavier Bertral, que es todo un especialista en los Elefantes, se ríe de ellos colocando sus manoplas carteriles, puños calefactables que le permiten llevar guantes medios con buen tacto. En nuestro país, tus manos las tendrás calentitas hasta con guantes de verano.
………..?………
…¿y  a ti qué más te da?  Ande yo caliente……

jueves, 8 de marzo de 2012

LA PALMA EN MOTO: LA ISLA DE LAS 20.000 CURVAS.


CRÓNICA DE UNA PASADA DE EXCURSIÓN. (NI SE TE OCURRA POR LA CUENTA QUE TE TRAE DEJAR DE LEER ESTO, POR QUE VAS  A IR)

El Roque de Los Muchachos. 2426 metros.

Conozco algunas de las islas canarias como Tenerife, La Gomera , Lanzarote y Gran Canaria ya que cada año intento escaparme al menos una semanita durante los primeros meses del año, justo cuando en la península el termómetro se encoje de frío. En moto alquilada o en moto de pruebas -el año pasado inicié y acabé desde Tenerife una vuelta al mundo sobre una Transalp y ahí la tenéis en el blog-, pasear en moto por tierras atlánticas  a  15º de mínima y 22 º de máxima y con el solecito acariciando tu casco en pleno mes de Febrero es una gozada.
Si tienes trabajo y te puedes permitir de vez en cuando hacer una escapadita y si, además, optimizas tu ingeniería económica buscando unos billetes aéreos baratos -los días posteriores a los carnavales- harás una magnífica  inversión sobre ti mismo. Yo te propongo un plan bueno, bueno, bueno, que estoy seguro te va a sorprender como lo ha hecho conmigo: patear al menos una buena parte de la Isla de la Palma en moto.
Siempre he tenido curiosidad por los confines, esos lugares que quedan apartados del mundanal ruido y del turismo de masas. Por eso este año junto con  mi amigo Mauricio Sedó, que conoce muy bien aquellos terrenos, decidimos hacer nuestra excursión a la llamada, con toda justicia, Isla Bonita y ya os puedo decir ahora que me ha alucinado porque se han ido encadenando una serie de sorpresas a medida que iba conociendo su terreno y sus gentes. Y si no te lo crees, sigue leyendo.

¿Asturias?¿País Vasco?. Esto es la isla de la Palma.

LA ISLA MÁS, MÁS.

 La Palma es una provincia de Santa Cruz de Tenerife y su capital es Santa Cruz de La Palma, aunque el municipio más poblado y bullicioso sea Los Llanos de Aridane.
Toda la isla es reserva de la Biosfera y, poca broma, la tercera  más alta del mundo -2.426 metros medidos en El Roque de los Muchachos, su punto más elevado-, gracias a sus impresionantes montañas volcánicas. La Palma está dividida en 14 municipios y rodeada de bosques de pino Canario y de laurisilva, que forman una de las más boscosas de todas estas islas. Los vientos alisios la mantienen húmeda y alimentan la animalada de clorofila de sus bosques y por ello es también llamada La Isla Verde. Es verdaderamente un paisaje impresionante con contrastes entre el norte y el sur, que se percibe más volcánico.
La impresionante Caldera de Taburiente es también el mayor cráter emergido del mundo y sobresalió, adivina cuándo, del fondo del mar hasta elevarse desde su base a una altura de 3.500 metros. La actividad volcánica es constante en el sur de la isla…aunque tú no lo ves.

Ruta de los volcanes, al sur de la isla.

¡OJO AL TSUNAMI DE 900 METROS DE ALTURA!
Hay una información inquietante –de hecho existen varias- que publica Vikipedia sobre un documental de la BBC emitido en hace unos años en el que se sugiere una hipótesis  terrorífica. En el caso, no imposible, de darse una erupción en la zona de la montaña de Cumbre Vieja, la desintegración de la misma haría deslizarse la masa volcánica hacia el océano y podría generar una ola gigante desencadenado un megatsunami de 900 metros de altura en la zona de las islas y éste se desplazaría a América, los Estados Unidos y el Caribe, a las 6 u 8 horas siguientes barriendo a todo quisque hasta 25 kilómetros tierra adentro.
¿No querías una aventura?! Es el mejor momento para estar allí!

¿PORQUÉ EN MOTO?
Te diré algo más. Hay una web que se llama “opiniones y comentarios sobre La Palma” que es para gente normal, o sea personas que van a ir o han estado en la isla para hacer senderismo tranquilo o para tomar el sol en la playa que es lo más establecido por este código nuestro de las buenas y sanas costumbres. El cuestionario te invita a poner tu comentario en una casilla marcada como  “me ha gustado” y otra al final de “lo que no me ha gustado”. Pues bien, una mayoría de gente normal señala en la casilla del “no”…!las excesivas curvas que hay en la isla!.
!Esa es la clave y la mejor noticia para los que no somos normales y que nos llevamos un casco motero en el avión !Y además mienten, porque en La Palma no hay muchas curvas…! Hay un porrón de “veintitresmilbillones” de curvas que no te dan aliento, curva “paquí”, curva “pallá”. !Ya te puedes imaginar lo que puede ser eso durante horas y horas subido en una moto!.
Bueno, quizá no son “veintitresmilbillones” de curvas pero sí, 23.000, que las he calculado yo, arriba o abajo. Pero empezemos primero por el principio…

La era espacial y el pasado.

LA TOMA DE CONTACTO DE LA ISLA
Desde Tenerife a La Palma hay dos posibilidades de transporte. Por aire, volando en las compañías Islas y Binter, o por barco –con tu moto, eso sí- en una travesía de algunas horas. Si vienes de la península, lo más práctico es, por precio y rapidez -media hora de vuelo-, el avión, y una  ida y vuelta bien buscada está sobre los 30 o 40 euros tomada con antelación.
José Alberto Martín, que tiene concesionario de Honda en Los Llanos, nos vino a recoger al aeropuerto y nos entregó dos Hondas Transalp prácticamente nuevas con 2.500 kms –una, fabricada en España y la otra, en Italia-. El precio del alquiler es de 200 euros los tres días por moto y una pequeña provisión de depósito. Antes de salir nos advirtió que tuviéramos cuidado con los radares. Mmm…..¿los radares en una pequeña isla en el confín del Atlántico?
Nosotros nos alojamos en el Hotel Las Olas, un bonito conjunto de apartotel situado en la playa de Los Cancajos en el otro lado de la isla a pocos kilómetros de Sta Cruz. Y nos alojamos allí porque su director, Manuel Orta, es “motero” y, como va a ser tu hotel también, te va  a tratar cuando te escapes a allí que ni lo soñarás. Tú, de entrada y cuando hagas la reserva, pregúntale por su Speed Triple y dile que vienes de parte de este blog y del que lo escribe. El precio es muy accesible aunque puede variar dependiendo de la temporada, pero seguro que te encaja en tu presupuesto (¿40 o 50 euros noche?).
Al día siguiente emprendimos la ruta hacia el sur rodeando la isla por Breña Alta con sus cientos de casas entroncadas en la ladera y a continuación atravesamos las zona de Breña Baja , Villa de Mazo, Fuencaliente -hay que ver los volcancitos-, Tazacorte, Los Llanos, Tijarafe, Puntagorda, Llano Negro y  Santa Cruz de la Palma. Una excursión que se alarga en el día y que se disfruta como pocos sitios en la península volando materialmente sobre la costa a alturas considerables con cortantes que te quitan el hipo. Toque de atención: de repente, en una carreterita huérfana de circulación y en medio de la nada, en zona de 50 por hora, se nos aparece camuflado un coche de la Guardia Civil con el radar colocado. Continuamos y seguimos.

Hotel Las Olas y la peña "Nube Negra". En primer plano Jose Juan Lynh y Manuel Orta el director.

Después de acercarnos a los volcanes de Teneguía y San Antonio, nos dirigimos al puerto de Tazacorte donde su microclima permite, ahora sí, ponerse morenito junto al mar. Arriba, a unos cientos de metros accediendo por una auténtica carretera de rallys que se abre entre palmerales y desde un espectacular mirador, uno se queda flipado, pero muy flipado, al  observar la panorámica que brinda la naturaleza delante de tus narices. La vista y su extensión es tan impresionante que muestra una parte importante de la isla con las gigantescas montañas que la rodean, mostrándonos desde su base una vertiente del volcán la Caldera de Taburiente y cómo quedan enganchados en sus ramales más bajos algunos núcleos urbanos con la población de los Llanos de Aridane como protagonista destacado. Como en Tenerife, también aquí se utilizan las suaves depresiones de las paredes de los volcanes para conseguir lugares de privilegio donde se han levantado las casas con inmejorables vistas de vigilancia. Ya sabéis que antes habían piratas.
Seguimos hacia el norte y la carretera siempre secundada por pinares y que en ningún momento deja de ser serpenteante, se me antoja parecida a la que puedas encontrar en tramos mediterráneos con vistas al mar como los de Tossa a Lloret, en la provincia de Girona. En Tijarafe comimos en La Muralla, un restaurante mirador agradable en plena carretera. (10 euritos puede ser la media de un menú).
Al llegar a  Puntagorda nos desviamos hacia el interior y la carretera comenzó a revolverse todavía más, lo que nos obligaba a gestionar las trazadas en 1ª, 2ª, y puntita mete y saca, a lo más, en 3ª .
Retrocedimos  para volver al hotel y tomamos la carretera que une los Llanos con Sta Cruz, que, de hecho, es el eje natural entre las dos poblaciones. Anochecía y saliendo de El Paso en un tramo de 200 o 300 metros …!pafff! , se ilumino la carretera clara pero fugazmente por un golpe de flash salido de un coche de la Guardia Civil …que fue a impactar a la matrícula de la Transalp de mi amigo Mauricio, que en ese momento había acelerado hasta conseguir los 70 u 80 por hora. Tuvo suerte. El guardia le dijo que podía marchar “porque la foto no había salido”. Luego, comentaremos el tema, porque ese eje es el preferido para educar a los conductores.

Jose Juan y su experiencia de 80 años.

¡TOMA YA MOTEROS!
-“Mañana jueves os he preparado una salida motera con un grupo de buena gente apasionada de las dos ruedas: los de la peña “Nube Negra”- nos dijo Manolo, el director del hotel “Las Olas”.
Fantástico, pensamos mi socio y yo. Porque dejar que alguien que vive en la zona te guíe es siempre una garantía de que no vas a perder detalle de lo interesante, sobre todo si dispones de poco tiempo. Yo ya hacía horas que tenía claro que, por el tipo de terreno visto, aquello era pasto sabroso de, o una supermotard  o una ligera 250. (Había visto una nuevecita Honda VTR 250 en el escaparate de Honda del amigo José Alberto que la hubiera convertido en imbatible por aquellos lares).
Al día siguiente y acabando de desayunar ya escuchamos la primera avanzadilla de los de la “Nube Negra” que iban llegando al parking del hotel!. No lo podía creer y me restregué los ojos pero lo cierto era que las primeras motos que llegaron no eran  supermotards …sino aparatosas ¡customs!. ¿Por dónde van a ir éstas, si no van a entrar en las curvas?, pensé?. Y para postre, y de repente, apareció ¡toma castaña! una voluminosa Harley Electra  pilotada por un ¡sonriente …octogenario!
¡El mundo al revés!. No daba crédito a lo que se iba aparcando por allí. ¡Varias Shadow, Suzuki Intruder, BMW 1200, aunque también había una VStrom, Diversion, Kawa 750 y hasta una SR 250!. Me acerqué en primer lugar a saludar al veterano piloto.
 -“Es José Juan Linch , tiene 80 años y ha tenido …17 hijos”, me dijo Rodrigo R Palacios, que nos hizo de perfecto cicerone con su VStrom. No lo podía creer aunque cuando José Juan me dijo que iba a buscar otra moto para la excursión pensé que, claro, aparecería con una pequeña 250 más lógica, pero no al cabo de 5 minutos …vino espatarrado en una larga Honda Shadow de hace unos años.
La ruta escogida fue la del norte, la ascensión  al Roque de los Muchachos, la punta más alta de la isla a 2500 metros de altura. Enseguida tomamos la dirección a Puntallana que queda en el Norte de La Palma. Rodando lentamente por las zigzagueantes cornisas que rodean la costa, el paisaje resulta esplendoroso.

Los Llanos de Aridane.

Mira chico, vas pasando por Bermeo, Getxo, Suances, Luanco, la costa de El Ferrol,…en realidad, la orografía te va recordando, cuando no cal,cando, las mejores zonas costeras del norte de la península. Si el verde de la tierra parece lamer el mar, a medida que nos adentramos en la zona más boscosa de las Mimbreras y el parque de La Laguna, ese verde intenso de La Palma   estalla ante tus narices como si fueran fuegos artificiales salpicando la vegetación con sus múltiples matices, que ni loco de marihuana consigue en su paleta un pintor.
Joder, te paras y te bajas de la moto porque aquello no se merece un paso fugaz, sino un homenaje a la naturaleza en toda regla …y entonces aparece un coche de la Guardia Civil y se bajan dos guardias jóvenes.
- Buenos días, ¿ qué hacen?.
- Fotos, ya ve, le digo
- ¡Ah!, me dice.
Después de revisar nuestra documentación, la de un motero de “nube negra” que se ha parado conmigo y la mía, nos hacen firmar una hoja.
- (¿)
- Es para registrar que hemos mantenido una conversación.
- ¡Ah!, exclamé con la boca pequeñita. Y se fueron.


CURVAS PARA DAR, TOMAR Y REGALAR
La ascensión al Roque consta de 900 curvas según mi compañero y amigo  periodista grafico Agustí  Carbonell, que ya estuvo hace unos años aquí.
-Y en la bajada por el otro lado hay 600, me subrayó
Yo he hecho mis cálculos y llego a una conclusión: si resulta que dan oficialmente 1200 kilómetros de carreteras -intrincadas eso sí- en la isla de la Palma, como digo de manera muy particular (si hay datos comprobados me gustaría conocerlos por curiosidad), separo 300 kms en los que cada 100 metros hay 3 curvas – los he visto y vivido -, 500 kms en los que cada 100 metros hay 2 curvas – también he pasado por ese tipo de carretera- y dejo 400 kms a curva por cada 100 metros, me salen 23.000 curvas. En dos días y medio de estancia hemos  realizado unos 400 kilómetros y calculo que habremos “negociado”…¿ tres mil ,… cuatro mil curvas?. Me explican, pero eso ya lo sabía, que antiguamente en las zonas más agrestes de una montaña soltaban un burro y allá por donde pasaba construían la carretera, el camino y la curva.
Vamos a poner más salsa a la cosa.


Vídeo
(pulsa play para ver el video)


Que yo recuerde, en todo nuestro recorrido con Mauricio no hemos visto una recta más larga de 500, 600 o 700 metros y de éstas, pocas, excepto la circunvalación de Santa Cruz que se estira hasta el aeropuerto, la propia pista de despegue, la antigua del viejo campo de aviación – antiguamente  la cruzaba una carretera y cuando venía el avión la cerraban al tráfico con una valla-,.. y el trocito de unos pocos cientos de metros …donde le sacaron una foto a mi compañero a 70 y pico por hora en un 50 y no salió. ¡Ah!,y 5 túneles que suman 1.831 de longitud.

Estábamos que de ese bosque que parecía una paleta de pintor monocromo los palmeros motorizados de “nube negra” iban tumbando máquina, ahora por un lado, ahora por otro, destacándose José Juan Lynch con su Honda Shadow , sus 80 tacos, y con su técnica “taconal”, esto es forzando sus botas contra el asfalto a modo de registros, que le permitían controlar su grado de inclinación. Majestuoso,el tío.

Una jornada de moto fantástica.

La última parte de la ascensión de ese parque nacional hacia las famosas  vistas sobre Taburente se vuelve áspera y hay que mantener la atención sobre la carretera ya muy empinada porque nos encontramos trozos de desprendimientos en forma de piedra o piñas caídas e incluso hielo. Cuando a pocos metros de la cumbre comienzas a superar a la decena de observatorios instalados en lo más alto de la montaña volcánica y te das cuenta de que superas a las nubes, lo que experimentas es algo mágico. Y cuando te asomas al gran mirador  la sensación..es que eres muy pequeñito. Una pulga en la tierra.
Hace frio allí arriba, al principio de Marzo. Abajo, en los Llanos de Aridane unos cuantos turistas –no es isla de masas- toman el sol en Tazacorte. Luego, nos deslizaremos por las 600 curvas hasta Breña Baja y de allí el amigo Rafael Plasencia nos obsequió en su casa con una magnífica cena palmera de despedida  en la que no faltaron sus papas, boniatos, escachon , pescadito, y sobre todo la salsa de Mojo.
La Palma es una isla atlántica húmeda y ya te digo que el equipo motero que has de llevarte en Febrero es el mismo que utilizarías en el centro de la  península en Abril. Barbour o cazadora de piel, con ropa de agua guardadita por si las moscas aunque hay que decir que a pesar de los nubarrones abundantes no cayó ni una gota en nuestra estancia. El Gorotex es un buen aliado aquí por sus características de buena transpiración. (En la zona de Los Llanos puede hacer calor).


MMMM……NO SÉ QUÉ DECIR…
He ido haciendo alguna referencia al tema de la vigilancia en carretera. Que quede claro. Un país tiene que tener sus mecanismos para mantener el orden, el cumplimiento de la ley y la seguridad del ciudadano. Faltaría más. Y eso lo tienen que hacer las fuerzas profesionales adecuadas, ya sea la policía Montada del Canadá, la Gendarmería, o la Guardia Civil .Y si me encuentro un control de alcoholemia en El Paso a las 3 de la tarde me abrazo al guardia porque me está garantizando que durante mi ruta en moto y en la tercera curva, y aquí hay la tira, no se me echará encima con un Seat Ibiza descontrolado, el borracho de turno.

Jose Alberto Martín en su establecimiento.

Pero reconozco que me voy con una más que cierta sensación de agobio porque aunque las características de la isla como he explicado limitan naturalmente cualquier “fantasía velocística” -aquí simplemente y aunque quieras es difícil pasar de 100 por hora- la asidua presencia de vehículos con radar camuflados, -alguno en una carretera sureña sin tráfico con señales de 50 y en medio prácticamente de la nada ,eso los vimos– me hacen plantear o que en la isla se delinque mucho y la gente vuela bajo con los vehículos, o, como también nos dijeron algunas personas ,”hay muchos guardias en práctica”, cosa que en un lugar tan pequeño donde la gente hasta se conoce puede acabar siendo un coctel surrealista con guion  de película italiana …y un marrón para el isleño en su día a día. Os lo voy a exagerar, pero es como si el Ejército hiciera maniobras dentro del camping. A lo mejor es eso, simplemente, y es que todo es pequeño y un guardia destaca más. Aunque, añado, si mis sensaciones no son positivas y las tienen otras personas es señal de que algo no está bien hecho.



Dicho esto, tomemos lo bueno y te digo que si te animas no vas a arrepentirte, vas a disfrutar como un camello de la mitad hacia arriba de la isla donde nadie te pondrá cortapisas En ese terreno solo estarás tú, para que te patees a placer curva a curva hasta llegar a ver La Caldera de Taburiente. La vuelta al sur disfrútala a ritmo de paseo, con sus volcanes y todo. Y recuerda 50 kmh no son 54. Son 50 por hora.

Potaje de trigo.Plato típico.

HOTEL LAS OLAS. Director : Manuel Orta . www.aparthotellasolas.es   tel 34922433015   Playa de los Cancajos s/n
MOTOS ALQUILER :  José Alberto Martín HONDA LOS LLANOS SL         www.hondalosllanos.com tel 922402325 - 922401643