Mostrando entradas con la etiqueta protección contra el frío. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta protección contra el frío. Mostrar todas las entradas

martes, 26 de noviembre de 2013

¿FRÍO EN LAS MANOS? PRUEBA GUANTES CALEFATABLES KLAN EXCESS PRO



El frío ha llegado y hemos de estar preparados


En uno de los artículos de este blog  ¡Guantes malos ...! ¡tengo las manos congeladas!, intenté explicar las causas del por qué a unos se les enfriaban antes las manos que a otros llevando el mismo tipo y modelo de guantes y con la misma temperatura ambiente e incluso en el mismo lugar. La respuesta, a veces, tenía que ver con la diferente contracción sanguínea que sufren las arterias de muchas personas ante las bajas temperaturas. Éstas producen un entumeciendo en las extremidades de diferente intensidad, -más en unas personas que en otras-, pudiendo esa alteración, en el peor de los casos, determinar que podría incluso deberse a padecer el síndrome de Raynaud.

También describía una comparación entre dos motoristas –se suponía que de parecidas características morfológicas- circulando uno por Madrid y el otro por Barcelona con la misma marca y modelo de guantes y bajo la misma temperatura un día de invierno, llegando a mi conclusión personal que las manos del barcelonés, por la sensación de mayor calado del frío debido a la mayor humedad de la costa, acabarían antes mas “heladitas” que las del madrileño.


Determinaba -lo consulté en varias tiendas- además que al final, entre un guante “normal” de 70 euros y otro supuestamente mejor que nos costara el doble, la diferencia era que el frío acabaría llegando en los dos casos, eso seguro, pero algo más tarde en los guantes caros. Solo era una cuestión de minutos.

Las alternativas para que nuestras manos aguanten más los envites del frío intenso continúan siendo los puños calefactables -una opción práctica para las palmas de las manos pero, sin embargo, imperfecta ya que dejan sin cobertura la parte superior de la mano. También pueden aislar del frio las manoplas forradas de piel de una pieza  -dedos agrupados juntos y el pulgar aislado- pero que, sin funcionar mal, no permiten un buen tacto sobre las manetas y una buena movilidad sobre la empuñadura. Las típicas e históricas manoplas grandes tipo cartero dan buen resultado y aunque poco estéticas y aparatosas al menos son prácticas ante las bajas temperaturas -se pueden llevar con guantes ligeros-, aunque en carretera a cierta velocidad están limitadas por los “bandeos” que provoca una aerodinámica muy pobre. No son nada amigas del viento.

Guantes calefactables Klan Excess Pro



UNA PRUEBA QUE APETECE AHORA

Este verano lo pase mejor en moto, más fresco –y paseando a pie también- porque descubrí el chaleco refrigerante.

Hace pocos días, y entrado ya el frío, la firma Comof me ofreció testar unos guantes Klan calefactables. He probado todo lo que os he descrito arriba pero nunca -aparte de un brevísimo contacto- unos de conexión a batería. En su catálogo existen variantes además de otros sistemas de alimentación, sea por batería portátil o por baterías independientes, aunque existen diferencias en el comportamiento. En la portátil, el grado de calor es igualmente alto pero la autonomía es más limitada, mientras que en las independientes la capacidad calórica es menos intensa y de duración más breve. La más práctica es la que genera la fija y propia batería de la moto que nos asegura constantemente recarga y autonomía total. 
  
Cuando abrí el paquete del envío me gustaron de inmediato el diseño de los guantes, su peso ligero, el tamaño y el acabado y, ya colocados, el suave tacto -lo recalco- cuando me los coloqué. Sí, aquello llevaba terminales eléctricos aparte de la pequeña conexión tubular que aparecía en las entradas de cada guante, no se notaban para nada al tacto. Ahora, el conjunto del paquete del cableado, en ese momento, me pareció algo lioso y excesivo, sensación que fue desapareciendo al separar los cables. Consta de tres. Una, el cable de conexión a los bornes de la batería que en teoría se alarga y esconde pasando por debajo del depósito hasta el final de éste y que acaba en un machihembrado; otro,  un corto cable que hace de puente y que incluye el mando regulador de alta y media potencia, y, finalmente, otro largo en forma de Y donde se conectan los guantes, y por el otro extremo, el del interruptor.


La primera intención es la de conectar los extremos del cableado a los bornes, pasarlo bajo el depósito y esconder después todo el entramado en algún lugar de la parte delantera. Luego, te sientas en la moto y conectas los guantes en las terminales .Todo parece más "limpio" colocado así ...hasta que te das cuenta que de esta forma apenas tienes movilidad en las manos aparte de estar enganchado, nada grave porque en caso necesario se sueltan por sí solas las conexiones.
La otra opción, mejor en la práctica, es conectar los dos terminales redondos a la batería haciendo un paquete del resto del cable que sobra junto a ella y dejando aparecer unos centímetros su otro terminal por debajo y exterior del sillín. Instalado esto -es muy fácil y evitas levantar el depósito-, antes de ponerte la chaqueta pasas por el interior de las mangas las mangas las dos bifurcaciones del Y dejando que asomen los terminales por los puños para conectar los guantes. Lo que queda, una conexión, la enchufas al terminal del interruptor que, a su vez, está conectado a la batería
Bueno, parece liado pero en realidad activas solo 3 conexiones (2 guantes y batería) y eso se hace en segundos.
Te voy a decir por qué vale la pena llevar esos guantes.
  



COMO VENGA FRÍO, FRÍO TE DARÁS CUENTA DE LO QUE LLEVAS …O NO LLEVAS

Mira, si tú solo utilizas la moto para hacer 7 kilómetros de tu casa al trabajo y te mueves por Málaga en enero, pues te puedes ahorrar la cuestión. Con unos guantes “abrigaditos” puedes ir seguramente bien…ahora, como subas por la sierra hasta Campillos, mejor que sigas leyendo.

El primer día que los probé en un recorrido por la costa norte de Barcelona hace unos días, a mediados de noviembre, de salida, ni los enchufé. El termómetro marcaba 21 grados. Iba muy bien y tan sólo los activé un minuto y en la posición baja para probar. Desconecté en seguida .Tiene dos modos: alta y baja.
Pero al día siguiente, las temperaturas bajaron bastante y salí de casa por la tarde a 11 grados. Sin conexión, noté en un momento cómo la parte superior de las manos recibía un “fríote” muy desagradable. Solo con la intensidad mínima conectada y en un minuto me entró un calorcillo agradable. Y aquí empiezan las diferencias con los puños calefactables ya que estos sólo calientan las palmas.
De vuelta casa, después de ver en Mataró la “pelí”  ‘El capitán Philips’, que te recomiendo, la temperatura se colocó en 6 grados y ¡ah, amigo!, en un plis plás, con la intensidad al máximo, mis manos recuperaron un calor que desconocía. Si ocurre eso además te recupera el “fríote” del cuerpo. Ya sabes que cuando las manos quedan frías es casi imposible, por  mejores guantes que lleves, ponerlas calientes otra vez. Puntazo de los Klan en este apartado.


La ruta así es mucho más agradable


Al día siguiente, marché a Madrid en tren. Vuelta y bajón de las temperaturas y yo heladito andando por la Gran Vía. ¡Ni me imaginaba salir de excursión a Toledo si hubiera tenido la moto y menos sin esos guantes calefactables¡

Ahora estoy escribiendo en el AVE de vuelta, a 299 km/h , con -4 grados al otro lado de la ventanilla y habiendo dejado Zaragoza hace 2 minutos. Si vives por ahí o en Ávila o en Cuenca o en Burgos o en León o en Orihuela del Tremendal  o también si coges la moto para una salida sin rumbo desde Guadalajara o desde Manresa, chico, yo no lo me lo pensaría, pillaba los Klan calefactables, me liaría los cables por la mangas y por donde hiciera falta y saldría tranquilo sabiendo que mis manos no se me congelarán mientras dure mi recorrido. Hay otras cosas para probar, sí, pero ...no sabes cuándo dirán hasta aquí hemos llegado.

La economía está muy “jodidilla” y a lo mejor te tienes que comprar unos. Si has pensado en unos más económicos, estos Klan se salen de precio. Pero si tu cartera está dispuesta a pagar más…a cambio de mas prestaciones –vaya, no me acordaba que el cableado te lo venden aparte por unos 40 euros o así, por si tienes otra moto- creo que es una buena compra y la mejor aliada contra el helor de la carretera. Suerte con la decisión. 




               

ACCESORIOS PARA HONDA CB 500 X



Pantalla original Honda y deflector Puig


Bueno, esta moto mía últimamente ha hecho de conejillo de indias para las marcas Puig y Shad. David Puig, responsable general de la marca en el departamento de I+D, quería saber mi opinión sobre la pantalla alta que ha elaborado para la Honda CB500X, – la fabrica en dos versiones, transparente y ahumada –. Curiosamente, yo ya llevaba instalada la original alta de Honda y…el deflector Puig sobre ella.
El funcionamiento de estas dos piezas es muy acertado ya que ese deflector es movible y logras encontrar el ángulo perfecto para evitar turbulencias en el casco e incluso mejora la aerodinámica –el viento que recibe el Top-case- haciendo que éste acepte mejor las fluctuaciones del aire a partir de cierta velocidad. Sí, vale, las maletas traseras son un apéndice no demasiado natural pero necesario en mi caso.
La pantalla Puig también es muy efectiva e incluso la estética no rompe con el estilo de la moto. Me gusta. Además, simplemente -igual no hace falta-, con intercalar un pequeño grueso en los dos tornillos de fijación superiores, se logra algo más de verticalidad y adaptación a las diferentes tallas de altura. Protege realmente bien y lógicamente afecta positivamente al comportamiento de la moto -más estable con Top-case-, optimizando mejor los flujos del aire hacia la maleta trasera. Las dos pantallas son discretas en su anchura lo que influye en pocos movimientos aerodinámicos delanteros.

Pantalla alta Puig


SHAD
Shad estudió sobre mi moto los soportes adecuados para instalar el Top-case y maletas. No era tarea fácil ya que los puntos de las posibles fijaciones de la CB500X no permiten demasiadas alegrías para un exceso de carga. Se solucionó el problema con esta barra transversal reforzada. Ante la seguridad, es lo que hay. Ese top -case SH 48 también es novedad por ser uno de los más ligeros, 3.7 kilos, y con capacidad para dos integrales.


Top-case Shad SH 48 y soportes





Fotos realizadas con Panasonic DMC TZ10 y iPhone 4S


(CLICA AQUÍ PARA PONER TUS COMENTARIOS)
¿De donde eres?