He tenido entre mis
motos y a lo largo de los últimos veinte años tres Triumph , una cromadísima
Thunderbird tricilíndrica, una gran trail Tiger 995i y la ultima, hace un par
de años, una clásica Bonneville T 100 que ha sido protagonista de diversas
pruebas y de algún viaje en este blog.
Cada una de ellas tenía su propio estilo y aunque la Thunderbird que compré a finales de los noventa me parecía preciosa -tenía mucho de custom- lo cierto es que me salió rana, con unos problemas de estabilidad serios. Lo que más me duele es que nunca, ni los mecánicos ni yo, descubrimos el origen del problema. La Tiger 995i tenía un motorazo tricilíndrico rudo pero con mucho carácter aunque era demasiado alta y pesada. Por eso, cuando apareció la nueva Bonneville en el 2001 y aunque yo tenía ocupada mi mente en otro tipo de moto -tenía 16 años menos,...buff cómo pasa el tiempo-, me causó tan agradable impresión que la colgué como candidata a tener en cuenta, y mucho, en futuras adquisiciones. Y es que cada vez que pasaba por delante del taller del concesionario Triumph en la calle Bruc y veía -no se me ha borrado la imagen- una cromada Bonneville T100 verde y plata que tenían expuesta me quedaba embelesado ante tanta belleza en una moto.
Cada una de ellas tenía su propio estilo y aunque la Thunderbird que compré a finales de los noventa me parecía preciosa -tenía mucho de custom- lo cierto es que me salió rana, con unos problemas de estabilidad serios. Lo que más me duele es que nunca, ni los mecánicos ni yo, descubrimos el origen del problema. La Tiger 995i tenía un motorazo tricilíndrico rudo pero con mucho carácter aunque era demasiado alta y pesada. Por eso, cuando apareció la nueva Bonneville en el 2001 y aunque yo tenía ocupada mi mente en otro tipo de moto -tenía 16 años menos,...buff cómo pasa el tiempo-, me causó tan agradable impresión que la colgué como candidata a tener en cuenta, y mucho, en futuras adquisiciones. Y es que cada vez que pasaba por delante del taller del concesionario Triumph en la calle Bruc y veía -no se me ha borrado la imagen- una cromada Bonneville T100 verde y plata que tenían expuesta me quedaba embelesado ante tanta belleza en una moto.
La nueva Street Twin con los escapes Vance & Hines, un sonido para recordar
Probé una al poco tiempo y me pareció, de entrada, muy llevable pero algo torpe en su tren delantero debido al gran diámetro de su rueda de 19. Sin embargo, lo que se me quedó grabado en el corazón a clavo y martillo fue el extasiante sonido que emitían sus dos escapes TOR – pillines, los de la tienda- que unas manos inteligentes habían intercambiado por los excesivamente discretos de la monta original.
Desde aquella toma de contacto han pasado por mis manos y con diferentes suerte ... bastantes motos y tal como tenía previsto que ocurriera algún día se me apareció finalmente en el 2012 una impecable Bonneville T 100 bicolor, tintada en granate y marfil. Tenía apenas 4.000 kms, me miró a los ojos y me dijo que quería venirse conmigo. Era una buena ocasión y no me lo pensé dos veces.
Es una máquina de la que tengo muy buenos recuerdos y a la que también le incorporé algunos inventitos en busca de optimizar el confort y mejorar la ergonomía. Digo hice, ya que desde hace un tiempo pertenece a mi buen amigo Josep Coll que os pondrá también su opinión sobre la nueva Bonneville .
Desde aquella toma de contacto han pasado por mis manos y con diferentes suerte ... bastantes motos y tal como tenía previsto que ocurriera algún día se me apareció finalmente en el 2012 una impecable Bonneville T 100 bicolor, tintada en granate y marfil. Tenía apenas 4.000 kms, me miró a los ojos y me dijo que quería venirse conmigo. Era una buena ocasión y no me lo pensé dos veces.
Es una máquina de la que tengo muy buenos recuerdos y a la que también le incorporé algunos inventitos en busca de optimizar el confort y mejorar la ergonomía. Digo hice, ya que desde hace un tiempo pertenece a mi buen amigo Josep Coll que os pondrá también su opinión sobre la nueva Bonneville .
Dos Bonevilles, la T100 y la Street Twin, dos épocas.
Esta semana, Triumph ha empezado a comercializar la moderna classic Street Twin 900 y próximamente, en un par de meses, lo harán sus hermanas mayores la Bonneville T 120, la T 120 Black, la Thruxton y la Thruxton R, todas con motor de 1200 cc, refrigeradas por agua, seis marchas, un montón de electrónica y con grandes derroches en calidad de materiales. Antes del 200, año que se puso en la calle la anterior versión y que fue una interpretación actualizada del modelo más emblemático de Triumph surgido en 1957, en España no la conocía casi nadie excepto los muy veteranos moteros. Ahora, y en el paso de los últimos años, esta generación -y ese es el gran éxito de Triumph - sabe lo que es una Bonnie, la admira y se emociona con ella.
La nueva Bonnie Street, nostalgias o modas aparte, llega, además, cargada de tecnología y de un fantástico dinamismo en su conducción.
La nueva Bonnie Street, nostalgias o modas aparte, llega, además, cargada de tecnología y de un fantástico dinamismo en su conducción.
La diferencia fundamental en la nueva Bonneville Street y
también en sus hermanas mayores de 1200 de próxima aparición,
estriba en que sus motores están calados a 270 grados brindando un punch
espectacular.
LAS BONNEVILLE Y LA NUEVA ERA: UN CAMBIO RADICALLa primera Bonnie del 2001 tenía 790 cc, daba 62 cv a 7400 rpm y se alimentaba por carburador. Posteriormente, su cilindrada aumentó a 865cc, subía a 67 cv a 7500 rpm y llevaba inyección. La Classic T 100, la mía, medía entre ejes 1.500 mm -es más larga que la Street -y su motor estaba calado a 360 grados, como todas y desde siempre en su larga historia. Ahora, los motores de las nuevas series van ajustados a 270 grados, toda una revolución que hace cambiar radicalmente el carácter de los nuevos modelos. (La actual Scrambler es una excepción. Desde hace años también incorpora esa configuración pero ofreciendo mucho menor par motor-incomprensiblemente- que las clásicas Bonneville de siempre)
La Street se adapta a cualquier carretera
! INOCENTE, INOCENTE! …O ESTA MOTO LLEVA SORPRESA EN SUS TRIPAS
Está claro que esta Street Twin nada tiene que ver con las clásicas Bonneville actuales del 2015 que, lógicamente, siguen en venta en los concesionarios. (Hay promociones al respecto con descuentos interesantes porque en realidad la nueva cuesta casi lo mismo). Los diseñadores han partido de cero desarrollando el nuevo motor y chasis y buscando en su nueva estética un estilo rompedor mucho más dinámico y actual, cosa que salta a la vista. Los cromados han desaparecido también y se han sustituido por pinturas nobles en las que predomina el negro.
Me cuenta Mikel, el jefe de ventas de Italomotor Triumph, que entre las personas que han contactado directamente o por teléfono interesadas por la moto, parece que algunas, pocas, se desinflan como un globo al conocer su "escasa "potencia de "solo" 55 cv. Bien, si eres uno de ellos y siempre de buen rollo, se me ocurre sugerir que no apuestes tu mano si crees que esta moto es una de esas tipo ...ni chicha ni limoná. La verdad, y en mi opinión, es que lleva un pedazo de motor divertido y con una pegada real sorprendentemente más efectiva que los que le tocaría por su caballaje.
Yo no recuerdo ningún propulsor con esa potencia (55 cv) que dé tanto el pego, incluso su fuerza -será que tiene también algo de custom- me recuerda a los bajos del motor "deportivo "de la Yamaha XVS 1300 que tuve. La mayoría de mis motos han fluctuado entre 50 y 90 cv y algunas de estas últimas parecían tener bastantes menos y otras de 60, al lado de esta Bonnie , como mínimo harían bastante el ridículo. Una buenaza como la Transapl 650 parecería a su lado una 125.
Yo, si fuera Mikel, le diría guiñando un ojo al descreído que “tengo dos Street Twin muy especiales, la de pruebas, que es un prototipo que da ...81 cv, y otra nueva a matricular con la misma potencia”. (Toda una engañifa, claro). Estoy convencido que si la tasta por carretera caerá por sí solo en la trampa. Lo único que habrá que hacer momentos antes de que extienda el talón, -no seremos tan malos de colarle la trola- es darle una oportunidad de reflexión –también es una cuestión de caridad cristiana- haciendo aparecer a todo el personal de la tienda portando un ramo de flores y gritándole todos a una con mucho alborozo: ¡INOCENTEEE... INOCENTEEE!
Primero, ya lo sabemos, pondrá cara de lelo pero seguro que se la compra igualmente.
El pulsador en la mano izquierda gestiona el ordenador de a bordo
¿TORTILLA DE PATATAS O PAELLA? Esta Street contemporánea está refrigerada por agua aunque mantiene las cinco marchas, todo un acierto - y eso que el desarrollo es largo -porque gestionan perfectamente su gran par motor, 80 Nm a 3230 rpm, atención, un 18 % más que la antigua –aunque me parece corta la cifra- (69 Nm a 5800). Está calado, como se ha dicho, a 270 grados -(también las de 1200cc)- y su potencia de 55 cv la han ajustado para que suba a 5900 rpm. (67 cv y 7500 rpm en la anterior Bonneville). Pasa así el Euro 4. Es hasta un 36 % más eficiente en consumo y la verdad que aunque no se contabilizó parece cierto.
A la T 100 costaba bajarla de 5.5 l.
Has leído al principio que me entusiasmó el precioso sonido que emitían los escapes TOR de la Bonneville que probé hace 15 años. Y tú también estás de acuerdo en eso si tienes una. Siempre ha sido el signo de identidad de esas bicilíndricas inglesas -al igual que el de las Norton- con su calado de motor configurado a 360 grados. Los dos pistones subían y bajaban a la vez. Era tan extasiante su sonido que, cuando corrí las 24 horas de Montjuich en 1968 con una Bultaco 250, lo peor fue que nunca pude pasar a las tres Triumph Bonneville que me precedían y que quedaron al final delante de mí y, lo mejor, que me estuvieron deleitando con sus sonidos de escapes - música celestial- durante las 260 vueltas de relevo que me tocaron hacer al viejo circuito.
Ya no habrá más música de órgano en las Bonnys de siempre pero escucharemos en las nuevas, mejor si es por sus Vances & Hines, lo más selecto de Tom Jones, a 270 grados, en sus buenos tiempos. ¿Qué te gusta más, la tortilla de patatas o la paella? Pues eso.
Dicho sea de paso, el culpable de la eliminación de la configuración a 360 grados la tienen ...las nuevas homologaciones medioambientales. Eso me dicen.
Ahí van algunas características técnicas y detalles:
Suspensión delantera: Kayaba 41mm, recorrido 120 mm. Dobles con precarga atrás con 120 mm.
Ruedas de 100/90/18 y 150/70/17, disco del de 310 flot y 255 tras, Nissin.ABS.
Distancia entre ejes: 1439 mm. Deposito de 12 litros (4 menos que la antigua Bonneville) Altura asiento: 750 mm. Peso: 198 k en seco.
Una moderna gran esfera contiene el velocímetro y también el ordenador de a bordo. Reúne los controles de la electrónica actuando si es preciso a través de un botón menú situado en la piña izquierda donde se activan la desconexión del control de tracción, el ABS , información de los consumos, marchas engranadas ,etc. Debajo del asiento, por fin con llave, hay una práctica toma USB.
Si le añadimos que incorpora embrague anti rebote, ayudas electrónicas de fábrica en la serie como el control de tracción y el Ride-by-Wire (acelerador electrónico) y el ya dicho ABS, nos encontramos delante de una moto a la última y una explícita interpretación de Triumph de cómo debe de ser una clásica del 2016. Hay más pero me cansa poner datos que están en la web Triumph y otras muchas webs.
Ya no habrá más música de órgano en las Bonnys de siempre pero escucharemos en las nuevas, mejor si es por sus Vances & Hines, lo más selecto de Tom Jones, a 270 grados, en sus buenos tiempos. ¿Qué te gusta más, la tortilla de patatas o la paella? Pues eso.
Dicho sea de paso, el culpable de la eliminación de la configuración a 360 grados la tienen ...las nuevas homologaciones medioambientales. Eso me dicen.
Ahí van algunas características técnicas y detalles:
Suspensión delantera: Kayaba 41mm, recorrido 120 mm. Dobles con precarga atrás con 120 mm.
Ruedas de 100/90/18 y 150/70/17, disco del de 310 flot y 255 tras, Nissin.ABS.
Distancia entre ejes: 1439 mm. Deposito de 12 litros (4 menos que la antigua Bonneville) Altura asiento: 750 mm. Peso: 198 k en seco.
Una moderna gran esfera contiene el velocímetro y también el ordenador de a bordo. Reúne los controles de la electrónica actuando si es preciso a través de un botón menú situado en la piña izquierda donde se activan la desconexión del control de tracción, el ABS , información de los consumos, marchas engranadas ,etc. Debajo del asiento, por fin con llave, hay una práctica toma USB.
Si le añadimos que incorpora embrague anti rebote, ayudas electrónicas de fábrica en la serie como el control de tracción y el Ride-by-Wire (acelerador electrónico) y el ya dicho ABS, nos encontramos delante de una moto a la última y una explícita interpretación de Triumph de cómo debe de ser una clásica del 2016. Hay más pero me cansa poner datos que están en la web Triumph y otras muchas webs.
Ligera corta y estrecha todo un placer curveando
PRIMERAS IMPRESIONES
Cuando me encontré delante de ella en el establecimiento de Italomotor en la calle Numancia, (al que agradezco que me prestara esa unidad de pruebas), la Street mezclada entre varias Bonneville "antiguas" del 2015 me pareció lo que es, mucho más compacta y pequeña y sobretodo más corta .Su estética es moderna, fun y muy personal y según el amigo David Puig (carenados Puig) bonita y en la línea de la BMW Nine. (Cuando me dejan una moto de pruebas suelo hacer un paseíllo para tantear opiniones).
Al jefe de ventas de Burras.eu, Toni Rodríguez, la moto le encanta y su frontal,- con ese gran faro, barras, fuelles, guardabarros,- le recuerda a la Guzzi V7. El motor - por cierto es el mismo compartido con los otros de mayor cilindrada - aparece limpio de tubos y conexiones exteriores. Se ha eliminado pues el enjambre tubular de gomas y racords metálicos que afeaban y...ensuciaban pantalones pringados - al menos a mí me ocurría -de aceite volatizado.
Aplausos y vítores para el asiento, - ,!tres, llegué a poner tres y remiendos en el tapicero en busca de confort para el culito en mi T100!- es plano, cómodo mientras duraron las pruebas y sobre todo caben dos, (buena distancia de estriberas también). Sí señor ....!Bravo! ,y tiene mérito porque la distancia entre ejes de la Street Twin, como he comentado, es corta, 143.9 , 6 cm menos que las anteriores Bonnevilles excepto las series SE con llantas de 17 que son iguales de cortas .
(Nota para algunos fabricantes: humillar al pasajero o pasajera sentándolo encima casi en la nada por muy circunstancial que sea su presencia ahí es cosa muy fea y un detalle despótico de mal gusto. Permitídmelo otra vez : !Bravo Triumph!.
Otra cosa es poder colocarle un transportín o top case pero lo que sabemos es que hay 150 accesorios a disposición para personalizar las nuevas motos así como tres Kits personalizados para la Street Twin. Estos son: Scrambler, Brat Tracker y Urban. (El Brat Tracker es el que incorporaba esta "modern classic" y que se compone de silenciosos Vance Hines, guardabarros desmontable trasero con faro, asiento acanalado marrón, intermitentes leeds compactos, puños Barrel Style en negro y cubre-cárter de aluminio cepillado. Mmm...bien pensado es una buena idea para subir bordillos con garantías. Lo malo es que el kit cuesta pasta,1.600 €, solo los escapes...900 €.
Otra cosa es poder colocarle un transportín o top case pero lo que sabemos es que hay 150 accesorios a disposición para personalizar las nuevas motos así como tres Kits personalizados para la Street Twin. Estos son: Scrambler, Brat Tracker y Urban. (El Brat Tracker es el que incorporaba esta "modern classic" y que se compone de silenciosos Vance Hines, guardabarros desmontable trasero con faro, asiento acanalado marrón, intermitentes leeds compactos, puños Barrel Style en negro y cubre-cárter de aluminio cepillado. Mmm...bien pensado es una buena idea para subir bordillos con garantías. Lo malo es que el kit cuesta pasta,1.600 €, solo los escapes...900 €.
Una bolsa sobredepósito puede ser un buen parapeto en salidas de largo kilometraje
HALA VÁMONOS YA CON LA STREET TWIN 900
Compacta como una Kawa W 800, (mira, queda ésta con motor a 360 grados) pasé mi pierna sin ninguna dificultad por encima de la Street y me senté sobre ella. Posición magnífica (mido 176 si me estiro mucho), pies en el suelo y, lo que es mejor, también los de la gente bajita que son muchos ya que la altura del asiento es de solo 750 mm. He visto emocionarse por eso -él no se dio cuenta-, a un amigo probador, buena persona pero algo cascarrabias, en el momento que se sentaba en la moto relajado y sin ninguna ansiedad porque suele tener muchas dificultades con las desmesuradas alturas en motos que parecen fabricarse para jugadores de la NBA.
En la Street, todo encaja. El manillar, perfecto en anchura queda cercano, lo contrario de la Bonnie mía que forzaba los brazos ...!hasta que tuve que convencer a un amigo para que fabricara unas levas que me acercaran el manubrio de mi Triumph T 100!.
El cuerpo, recogido y a gustito, las levas del embrague y freno a medida de mi mano ...y de la tuya.
Y el momento más
esperado, por fin, llegó.
En medio del gran local de Italomotor, los dos escapes de Vance & Hines sonaron roncos, potentes como ....¡el de una Ducati !.
-Jooope - dije mirando a Eric,-!suena como una Ducati ¡
- ¡No,no, no es como el de una Ducati !- me dijeron los de allí al lado con cara de …ay ay ,ay.
Qué inteligentes han sido los del departamento de marketing de Triumph Motorcycles Ltd Hinckley.Mmmm…¿una moto que de delante recuerda a una Guzzi V7, pequeña como una Kawa W 800, con un estilo y trasero que recuerda a la BMW Nine, un motor estéticamente Triumph Bonnie,…pero que suena y se lleva como una Ducati Montster y frena de delante -avanzo- como una Yamaha R6?. Todo el mundo contento. Vamos, estos chicos merecen medalla.
Es una moto muy ágil y deja en otro mundo a mi querida Bonny T 100, con unas ruedas, las de la nueva, más preparadas. Monta una pulgada menos, 18, delante. Aquí no hay historias raras de amortiguación tampoco como las que os he ido comentando en mi Bonneville, ni hay que hacerle arreglos por ese motivo porque todo va y va bien.Las suspensiones se muestran en un primer recorrido suaves y hasta cómodas pero por poco que te metas en zonas irregulares protestan. Parece que tengan poca excursión, sobretodo de delante y eso que detrás son 2 cm más largas. (Comprobadas presiones a 2.7 anterior y 2.6 posterior.
En medio del gran local de Italomotor, los dos escapes de Vance & Hines sonaron roncos, potentes como ....¡el de una Ducati !.
-Jooope - dije mirando a Eric,-!suena como una Ducati ¡
- ¡No,no, no es como el de una Ducati !- me dijeron los de allí al lado con cara de …ay ay ,ay.
Qué inteligentes han sido los del departamento de marketing de Triumph Motorcycles Ltd Hinckley.Mmmm…¿una moto que de delante recuerda a una Guzzi V7, pequeña como una Kawa W 800, con un estilo y trasero que recuerda a la BMW Nine, un motor estéticamente Triumph Bonnie,…pero que suena y se lleva como una Ducati Montster y frena de delante -avanzo- como una Yamaha R6?. Todo el mundo contento. Vamos, estos chicos merecen medalla.
BROOOOMMMM,…BROOOOMMMM
Arranqué suave y enérgico a la vez y tomé la Gran Vía de Barcelona para salir lo antes posible de la gran ciudad. Piernas juntitas y guiado tan cómodo que parecía llevar una Street con chip de memoria salva obstáculos. La” Ducativille” o, perdón, la Bonnie Street en parado y al ralentí respira fuerte si abres un pelo el gas y lo mantienes fijo, brama como lo hace el bostezo de un león al despertarse y preparar el día pero si aceleras ruge espectacular con gran complacencia de los Vance & Hines. En Gran Vía-Aribau, y en la parrilla de salida esperando semáforo, dos golpes al gas son suficientes para hacer girar las cabezas del personal de motos y coches en busca de la Ducati que retumba a punto de despegar.
Empuja linealmente con patadón notable pero controlado aunque, eso sí, tampoco va a ofrecer el milagro de los panes y los peces, ni tiene 130 cv pero enseguida, muy rápidamente ves los 140…y cortas que la vida y las multas son caras. Siempre hay motor y el paso de curva se hace limpio y veloz, -hay suficiente goma y se nota –y frena de cine. ¿Que si el ABS o el control de tracción es más o menos intrusivo?, ni idea, yo lo que sé es que nos lo hemos pasado muy bien. Sí que parece que el acelerador electrónico, -eh, que funciona- tiene un pequeñísimo desfase tanto en aceleración como en retención del motor y me comentan que es así para que en las rotondas el motor vaya más fluido. Bueno….
Es una moto muy ágil y deja en otro mundo a mi querida Bonny T 100, con unas ruedas, las de la nueva, más preparadas. Monta una pulgada menos, 18, delante. Aquí no hay historias raras de amortiguación tampoco como las que os he ido comentando en mi Bonneville, ni hay que hacerle arreglos por ese motivo porque todo va y va bien.Las suspensiones se muestran en un primer recorrido suaves y hasta cómodas pero por poco que te metas en zonas irregulares protestan. Parece que tengan poca excursión, sobretodo de delante y eso que detrás son 2 cm más largas. (Comprobadas presiones a 2.7 anterior y 2.6 posterior.
La moto en vía rápida
y con depósito lleno – ya sabéis que normalmente en vacio aumentan las vibraciones de marcha
por el efecto hueco y eso se notaba notablemente - entra a partir de 100-120 en zona tensional de vibración
progresiva y los 270 grados de su calado de cigüeñal no son ajenos a ello. La
velocidad de crucero –sin protección no voy ni a la esquina y ya veis la bolsa
sobre-depósito instalada para esconderme tras ella- puede ser alta pero ahí la “vieja” Bonneville le gana con su suave
bicilídrico a 360 grados. Todo no puede ser. El motor de la Street Twin -de
moto de calle nada- será una Macho Bike para lo bueno y para lo menos bueno.
Seguro que me dejo
cosas pero ahí estan las opiniones interesantes de sus pruebas de mis amigos
Jaume Gonzalez , Josep Coll, Jordi Bordas y Joan Ventura
Esta Street Twin es mucho mejor que la anterior
Bonneville. Ahora,mmm…si compramos unas cuantas de esas, ya antiguas, las
metemos en una caja y las guardamos …7 años, ¿cuánto podríamos pedir por ellas?
Serán auténticas classic vintage pseudo-reto, ¿no?.Yo no puedo pero tú, a lo
mejor, sí. Saludos
Me bajo de mi Tiger y, tomo el
manillar de la nueva Bonneville 900 para darle apenas unos golpes de
gas...la encuentro amable, fácil ...nos entendemos sin apenas esfuerzo.
Pongo marchas... ligera, manejable, me lleva sin más, simple...es la
esencia, todo en su sitio....algunas curvas y regreso. Pienso... esta es
la moto que me llevaría a cualquier parte, y para cualquier ocasión.
Jordi Bordas (Periodista). Moto actual Honda CBF 600:
Pequeña
pero matona…..dentro de lo que se le puede exigir. En cuanto la ves en vivo y
en directo, esta Street Twin destaca por sus contenidas dimensiones –corta
distancia entre ejes, asiento bajo, depósito pequeño….- pero sorprende en
cuanto sueltas el embrague –pura mantequilla- porque notas que el motor empuja
con fuerza y alegría desde el primer instante. Luego sigue sorprendiendo porque
vas cómodo, en especial si eres un piloto de talla media (1.70 metros en mi
caso). No conduces con los brazos muy estirados, ni fuerzas las piernas, ni la
nuca protesta porque tu espalda no adopta posiciones extrañas.
Descubiertas
estas sensaciones y aún analizándolas llegas a la primera a la primera curva y
tampoco tienes que aplicarte mucho para abordarla porque la moto entre con
docilidad y te basta jugar con la retención de su motor –enorme retención- para
que resuelvas el compromiso sin angustias y sin tener apenas que recurrir al
freno. Enfilas la recta y vuelves s percibir la fuerza del bilicíndrico que
parece no corresponder a los 55 caballos de potencia que la marca británica
declara para este modelo. Es en los tramos rectilíneos cuando hechas en falta
una pantalla, por pequeña que fuera, para evitar que el viento impactara
directamente sobre tu cuerpo pero, como suele decir el fundador de este blog,
“esto tiene fácil arreglo”. Y sonríes porque, en pleno mes de febrero, aunque
sea un mes de febrero totalmente diferente a lo que correspondería para esta
época del año, agradeces el calor que sientes en tus rodillas y en la parte
superior de las piernas. Luego pensarás en cómo solucionar esta circunstancia
cuando llegue el calor porque, seguramente, éste será uno de los aspectos
negativos de esta moto.
Llegado
el momento de la parada para descansar, te resultará muy fácil dominarla y
maniobrar con ella porque, con mi 1,70 metros de altura, se llega sin problemas
al suelo apoyando COMPLETAMENTE los dos pies. Ni puntillas, ni medio pie.
Simplemente, perfecto. Luego, lo más probable es que alguien se detenga para
mirarla y comente con una pizca de envidia: “! Qué bonita!”. Sonríes y vueles a
admirarla y llegas a la conclusión de que, entre los detalles que te gustan, se
encuentra el indicativo de marcha engranada, un cambio preciso, unas
suspensiones correctas y la facilidad con que vas a poder hinchar los
neumáticos gracias a las válvulas en forma de codo, de manera que esta operación
no resultará ni complicada ni te ensuciará las manos…por lo menos en demasía.
En
el lado opuesto de la moneda, echo en falta un cuentarrevoluciones, unos
retrovisores que ofrezcan un mayor campo de visión y la sonoridad tradicional
de esta británica: no suena como una Triumph. Se ha “ducatizado”. Pero el
resultado final no deja lugar a dudas. ¿Cierto?
Como propietario de
la Bonneville T100 ha sido sumamente interesante poder probar la nueva Triumph
Street Twin que aunque la serie sigue llamándose Bonneville, tiene poco que ver
con la que llevo habitualmente.
Lo primero que llama
la atención es el sonido de los escapes, duro y seco que da la sensación de
llevar un motor con mas potencia de la que en realidad tiene, pero que resulta
muy agradable para el estilo deportivo que tiene este modelo. Otra característica
que me ha sorprendido es el desarrollo largo que tiene el cambio puesto que la
primera es perfectamente utilizable en curvas muy cerradas o rotondas y las
marchas intermedias se estiran mucho, de hecho con el viento tan violento que
hemos tenido en el día de la prueba, me ha resultado muy dificil poner la 5ª
marcha que además tampoco me parecia necesario puesto que con la cuarta ya
tenía bastante, quiza tambien esto sea debido a la buena respuesta en
bajos que ademas permiten una salida y recuperación muy notable, si se te va la
mano un poco puede ser incluso violenta. El chasis da mucha confianza y al poco
rato de conducirla ya me parecía que llevaba mucho tiempo con ella y en las
curvas te hace sentir muy seguro.
En conclusión me ha
parecido una moto que aunque va bien en todo tipo de carreteras, por sus bajos
y buena estabilidad donde se siente mas a gusto es en las curvas de donde
la hemos estado probando.
Joan Ventura (Gestor). Moto actual Honda Integra 750:
El amigo José María,
entre muchas de sus virtudes, tiene la de poder disfrutar de muchas motos que
aparecen en el mercado y en esta ocasión ha tenido la oportunidad de probar a
la nueva de la familia Triumph, la Street Twin para así, exponernos en su blog
sus apreciaciones, sus pros y contras, sus virtudes y defectos, sobre la misma.
Pero, a más, ha
insistido que algunos también expongamos nuestra opinión-sensación sobre la misma,
después de una breve cata sobre ella, y a mí, como antiguo poseedor de una de
las más clásicas de la familia bonneville la T-100 Black, también me ha
propuesto que exponga mis sensaciones particulares sobre la misma, pues bien
allá voy:
No me extenderé sobre
el particular, para eso ya está él, pero sí que para ser breve diré, que para
nada me hizo recordar a mi anterior Bonni, es más y de entrada no sé si realmente
lleva ese apellido, porque ni por ergonomía, ni por peso, ni por ligereza,
tiene ningún parecido a la anterior Bonneville T-100. No quiero decir que sea
peor ni mucho menos, es distinta, es otra cosa y además más moderna y
superdivertida, pero a estas alturas a mí ya no me encaja.
Creo que en Triumph
han sido honestos y en una cosa no han querido engañar a nadie, con el sobrenombre
de “Street” (calle) deja claro sus intenciones, es para aquellos que gustarían
de una Yamaha T-Max, pero prefieren una moto a una scooter.
Fantástica!!